Así lo expresa y lo sintetiza Juan Pablo Roma, un joven diseñador roquense. Ama, expresa y defiende el ser libre en todos los aspectos. Desde el 2017 dedica sus días a crear indumentaria que haga sentir a sus clientas no sólo cómodas sino representadas por la prenda que llevan puesta. Vestir para él “jamás ha expresado la identidad sexual porque la identidad sexual es diversa, las prendas no tienen género, son costuras, son historias, son pedacitos de cada uno, lo que representa la persona y lo que la persona quiere comunicar.”
Desde que nacemos nos han inculcado socialmente, a la mayoría de nosotrxs, que el color rosa se asocia a las nenas, a la sensibilidad y de forma implícita le asigna al género femenino la preocupación y el esfuerzo por sus afectos. Al género masculino, el que va ganarse la vida trabajando, en cambio se le otorga el color celeste lo aleja de lo sensible. Pero ese color no es tan «sensorial» porque las mujeres al ser más grandes lo incorporan a su placard. El rosa en cambio no era muy bien visto en los varones hasta hace algún tiempo en donde las nuevas generaciones comenzaron a imponerlo en la indumentaria masculina.
La ropa comunica. Y comunica más de lo que nosotros imaginamos. Por eso en el día del orgullo gay me parecía interesante poder plantearnos este tema. Le consulte a Juan: ¿la moda está contemplando la cuestión de romper estereotipos en nuestro país? A lo que él contestó “Desde mi experiencia, sí y no. Sí, porque hay marcas cuya impronta es el “No Gender” y con variedad de tallas, marca que confeccionan desde otra mirada, marcas y en esta categoría me incluyo, que quieren que el cliente sea el protagonista y no la ropa. Y no porque todavía la gran mayoría de las marcas venden el modelo ideal de belleza, esta nueva oleada de pibes que queremos que el mundo sea más justo y menos doloroso de vivir vino a cambiar esto y se brinda por ello”
Su marca personal de indumentaria se llama ROMA pero también puede significar un juego de palabras por el AMOR que le pone a su trabajo. Él trabaja las prendas en forma personalizada, atendiendo las inquietudes de sus clientas y confeccionando las prendas a medida. “Me acuerdo exactamente y muy bien cómo fue que elegí esta profesión, fue mientras cursaba el último año de secundaria, mi idea inicial era estudiar Astronomía, pero en medio de una clase que no recuerdo, la inspiración y el llamado llegó, de la nada, fue un momento, supe que quería esto y que no me imaginaba no estudiando diseño, así fue que meses después ya estaba inscripto en la carrera. Desde mi experiencia no significó tener que romper nada, supe que esto era y pelee por ello, tenía en claro que mi formación estaba a mi cargo y solo yo decidiría que estudiar, a mi favor, mi padre me apoyó y costeó la carrera.” así cuenta El joven diseñador cómo tomo la decisión de ser quien es hoy.
Campera upcycling realizada con un vestido vintage y un jean
Elegí a Juan para charlar sobre este tema porque pertenece a una generación de jóvenes que buscan romper estereotipos, aceptando diferencias y sobretodo defender la libertad. “Ya una gran parte de la industria es diversa e inclusiva, algo que tiene la moda como concepto es que es tan relativo, que cada marca construye su imagen desde varios aspectos. Se celebra que cada vez hay marcas con perspectiva de género, cruelty free y con conciencia ambiental. También cabe decir que esta revolución obliga, por decirlo de alguna manera, a las marcas a adaptarse con el tiempo y así con las nuevas exigencias de la gente. Cada vez hay más moda “real”, con esto me refiero que, la moda se construye a partir de creer que todos somos iguales y que hay espacio suficiente para que cada uno haga del vestir lo más honesto y fiel a cada creencia personal.”
Vestir y ser van de la mano, sino cómo explicamos la clásica frase “Salir del clóset!” Cuando nos vestimos, si bien lo hacemos para sentirnos bien con nosotros mismos, muchas veces la mirada del otro tiene mucho peso. Además muchas personas juzgan por la imagen que proyecta el “otro”. Básicamente salir del closet tiene origen con la expresión “coming out of the closet” haciendo referencia a exhibir lo que una persona ha mantenido oculto. También tiene relación la frase “tener un muerto en el placard”. El closet, el placard es lo que encierra y nos permite tener guardado esos secretos que no develamos a la sociedad sólo por miedo de no ser aceptadxs.
Hoy 28 de Junio, como cada año, se celebra El Día Internacional del Orgullo LGBT+ (lesbiana, gay, bisexual y transexual), también conocido como Día del Orgullo Gay consiste en una serie de eventos que los distintos colectivos realizan públicamente para luchar por la igualdad y la dignidad de las personas gays, lesbianas, bisexuales y transexuales.
Estas celebraciones tienen un trasfondo reivindicativo ya que en muchos países la condición sexual sigue siendo un condicionante, se la criminaliza y aunque las leyes los amparan, no están aceptados socialmente. “toda manifestación tiene como objetivo garantizar los derechos colectivos e individuales, a pesar del amor desmedido que se genera, no deja de ser una lucha que aún no concluye, nadie en esta vida tendría que salir a marchar para amar.” opina Juan y reflexiona “Por eso la marcha del orgullo no es solamente una bandera de arcoíris y mucha gente, la marcha es un grito desesperado de que no haya ninguna marcha más, porque pensándolo bien ¿quién hace una marcha para poder amar? El amor no se cuestiona, el amor se siente y nace, el amor es leal y puro, no tiene género ni sexualidad”
Este año 2020, debido a la pandemia de COVID-19 la celebración del Orgullo Gay se ha decidido que sea de manera online, sin perder el carácter reivindicativo. “Este año la marcha será muy distinta a las demás, por lo motivos que ya todo sabemos y de memoria. Por eso desde este lado, de este pequeño rincón en una computadora prestada, marcho, marcho por los que siguen en la penumbra, marchó para qué amar no sea delito, marchó por cada compañero, compañera y compañere que no ha podido seguir este camino. Marchó en nombre de todes los que quieren un mundo más honesto y más justo, marchó para que la libertad no tenga que ser luchada.”
Nuestro vestir habla de lo que somos. Hay personas a las que les cuesta poder vestir y pensar al unísono, mostrándose tal cual es. Usar lo usa todo el mundo no es la solución, porque no todos pensamos y decimos lo mismo. Además de que sería totalmente aburrido. El lenguaje de la moda nos permite ser, ya sea lo que aparentamos ser o lo que realmente somos. Y creo que este día es uno de los más indicados para invitar a la reflexión, alejarnos de juzgar y permitirnos disfrutar del vestir en nostrxs y en los otrxs. Celebremos hoy y todos los días el orgullo y la libertad de ser diferentes.
Agradecemos a Verónica Ramírez y a Juan Roma por compartir y ponerle voz al cuento de Juan Solá: Mirá. Que lo disfruten!